“El Pampayoj”, llamado también Pampayu, es el numen de la pampa, o la madre de la tierra, como algunos le llaman.
Según la leyenda que corre por los departamentos centrales de la Provincia de Santiago del Estero, el Pampayoj se presenta algunas veces bajo la forma de un avestruz blanco o de un guanaco enano.
Otras veces, bajo la figura de un jinete sobre caballo plateado, el cuál hace señas a los rodeadores de suris, llamándolos.
Quien con coraje, osa acercarse al desconocido o bolea al avestruz blanco o al guanaquino, se pierde irremediablemente.
Esta leyenda parece tener atenencia con la de la Madre de la Tierra, según la cuál, en época de grandes tempestades se oye en las profundidades del suelo un ruido sordo como de ladrido de perro.
Una y otra estarían identificadas con la protección que sus deidades parecen ejercer sobre los animales del campo.
Don Gabino Ledesma, el viejo cancerbero de la capilla de Matará dice: que el Pampayoj tiene la figura de un “cristiano” vestido de blanco y refiere que una vez, un cazador, encontrándose en monte empezó a matar “puro gusto, toda laya de bichos: querquinchos, pichicitos, corzuelas...” y con un cuchillo les iba cortando en “el encuentro” para saber si eran gordos.
Si no estaban bien “cebados” los arrojaba los arrojaba tranquilamente y proseguía la marcha.
En una de esas, cuando estaba entretenido en su faena de exterminio se le apareció el Pampayoj, apresó al cazador y le colgó el caballo de un árbol.
Allí en medio del bosque, lo tuvo un tiempo.
Después que comprendió lo malo que hacía “desperdiciando tanta comida”, el Pampayoj le mostró un árbol con miel para que lleve a su casa y le regaló un guanaco para que haga “charqui”.
Y don Gabino termina su relato diciendo:
“No sabe ser bueno cazar de vicio, ni hacer daño a los animales, porque el Pampayoj puede enojarse”.
Dr. Orestes Di Lullo,
El Folklore de Santiago del Estero. Pág. 160-161.
En Catamarca se lo conoce como el Llantay.
Compilación. Prof. Teología y Antropología Social y Religiosa. Georgina Palmeyro.